En Buenos Aires, el adolescente Hernán Cattáneo tuvo una revelación cuando descubrió el trabajo del DJ americano Frank Knuckles, que consiguió unir la energía de la música electrónica europea con los toques americanas. Comenzó a tocar en fiestas, en el Clubland de Buenos Aires, y fue para la radio, en la que se tornó uno de los pioneros en la difusión de la house music en Argentina. Después, partió para las giras mundiales y para el circuito de los grandes clubs internacionales. Ya dividió pick-ups con otros DJs famosos y abrió shows de New Order, Nine Inch Nails, Coldplay, entre otros.